Luego de confirmarse en mayo una desaceleración significativa de la inflación, que bajó al 4,2% tras el 8,8% del mes previo, el aumento de tarifas de gas y de electricidad anunciado para este mes podría ponerle un piso transitorio más alto al índice de precios, ya que tendría un impacto de entre 0,7 y 0,9 puntos porcentuales, según estimaciones privadas.
La Secretaría de Energía determinó para junio una quita de subsidios en los servicios energéticos para comercios, industrias y todos los usuarios residenciales, con subas promedio de entre 6% y 19% en el servicio de gas (dependiendo del nivel de ingresos del hogar), y de entre 18% y 94% en electricidad. Además, redujo el volumen máximo subsidiado para los usuarios de luz de ingresos medios y bajos. Por lo cual, los aumentos podrían ser mayores para los que se excedan de esos bloques -250 kwh mensuales para los de ingresos medios (N3) y 350 kwh para los de ingresos bajos (N2)-, ya que por el excedente pagarán el mismo precio que tienen los usuarios de ingresos altos (N1).
En ejemplos concretos, una boleta de gas de un hogar N1 con el servicio de Metrogas pasará de costar $ 26.114 a $ 27.691 (6%); para un N2, subirá de $ 19.871 a $ 23.651 (19%), y para un N3, de $ 22.819 a $ 24.968 (9%), según las estimaciones de la consultora Economía & Energía (EyE), que dirige Nicolás Arceo. “En términos interanuales, las tarifas de gas natural verifican incrementos superiores a la inflación del último año en todos los niveles de ingresos”, dice el informe, que señala aumentos interanuales en junio de 406% para los N1, 745% para los N2 y 544% para los N3. Esta situación era esperada con el cambio de gobierno, ya que el costo de las tarifas de servicios públicos había quedado muy atrasado con relación al resto de los precios de la economía.
En electricidad los aumentos son mayores, porque la anterior suba había sido en febrero y la cantidad de subsidios que recibían los usuarios de ingresos medios y bajos era superior. En detalle, una boleta de luz en el área metropolitana de Buenos Aires (AMBA) de un hogar N1 pasará de costar $ 29.651 a $ 34.953 (18%); en el caso de un N2, aumentará de $ 11.327 a $21.966 (94%), y para un N3, de $ 15.184 a $ 26.259 (73%), según las estimaciones de EyE.
Fuente: La Nación