La reversión del Gasoducto Norte es una proyecto clave para del desarrollo energético de Argentina y ha cambiado el panorama energético de la región.
En noviembre de 2023, se inauguró la reversión del Gasoducto Norte, lo que permitió que el gas natural de Vaca Muerta llegara a los hogares y las industrias de Tucumán. Este proyecto ha sido fundamental para el desarrollo energético de la región, ya que ha permitido reemplazar la provisión de gas desde Bolivia.
La reversión del Gasoducto Norte ha tenido un impacto significativo en la región, ya que ha permitido aumentar la capacidad de transporte de gas natural. En los últimos meses, las provincias del NOA recibieron aproximadamente 15 millones de metros cúbicos diarios de gas a través del Gasoducto Norte, a lo que se sumó una capacidad adicional de 2 millones de metros cúbicos provenientes de Salta.
La demanda de gas en Tucumán ha sido significativa, con un consumo diario de entre 4 millones y 4,5 millones de metros cúbicos. Esta demanda se distribuye entre la demanda residencial, las empresas y las usinas, entre otros sectores. Con el descenso de las temperaturas y el avance de la cosecha de limones y otras actividades productivas e industriales, se espera que la demanda varíe con el paso de las semanas.
La reversión del Gasoducto Norte se produjo en un contexto en el que Bolivia enfrentaba una crisis energética debido a la reducción de su producción de gas. Esto llevó a la reutilización de la infraestructura para el transporte de gas argentino, lo que benefició a las provincias de Córdoba, Salta, Jujuy, Santiago del Estero, Catamarca, La Rioja y Tucumán. La entrada en operación de la reversión del Gasoducto Norte permitió a Argentina cubrir la demanda de gas de estas provincias y, al mismo tiempo, permitió a empresas radicadas en la Cuenca Neuquina cerrar contratos para exportación.