La crisis energética en Bolivia se profundiza, con una producción de gas en baja y una economía que se resiente por la disminución de los ingresos petroleros.
La producción de gas natural en Bolivia sigue en declive, según datos de la Dirección de Hidrocarburos, Minas y Energía del Gobierno Autónomo Departamental de Santa Cruz. En enero, la producción llegó a solo 26,42 millones de metros cúbicos día (MMmcd), lo que refleja una disminución significativa en comparación con años anteriores.
La reducción en la producción se debe en parte a la disminución de la demanda del mercado brasileño, que ha sido el principal destino de las exportaciones de gas boliviano. La planta Incahuasi, que es una de las principales fuentes de producción de gas en Bolivia, ha mantenido una producción baja debido a la baja demanda del mercado brasileño.
La situación se ha visto agravada por la decisión de Argentina de dejar de importar gas boliviano, lo que ha significado una pérdida de comercialización del 20% del gas natural para Bolivia. A pesar de que el Ministerio de Hidrocarburos había asegurado que el volumen de gas exportable no se vería afectado por el cese de la demanda de Argentina y sería redirigido al mercado brasileño, esto no ha sido posible.
La Dirección de Hidrocarburos, Minas y Energía del Gobierno Autónomo Departamental de Santa Cruz ha señalado que la comercialización de volúmenes de gas natural al mercado de Brasil registró un promedio mensual de 12,8 MMmcd en enero de 2025, lo que refleja una disminución del 12% en comparación con diciembre de 2024.
En este contexto, se espera que Bolivia pueda aprovechar los ductos nacionales para transportar gas argentino al mercado brasileño, lo que podría generar ingresos adicionales para el país. Sin embargo, hasta el momento esto no ha sido posible, y se espera que este año se pueda concretar este proyecto.
Fuente: vision360
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