La demanda y producción de gasoil está en niveles históricos, ya que entre marzo y mayo, la industria despachó un 12% más que en 2019.
El Gobierno autorizó a las petroleras a incrementar la capacidad de abastecimiento de gasoil a través de una mayor cantidad de «corte» de biocombustibles. Eso implica un mayor costo para las compañías, de aproximadamente un 7% de impacto en el público.
Pero, además, se suma una recomposición adicional cercana al 5%, según lo decidido por las empresas.
El litro de gasoil común pasó en Buenos Aires de los $113 actuales a más de $126. Mientras que en los premium, la suba será de $145 a $165, siempre en los surtidores de YPF. Las otras petroleras (Axion, Shell, Puma) suelen manejar precios más elevados, y también son mayores en la mayoría de las provincias.
La demanda y producción de gasoil está en niveles históricos, ya que entre marzo y mayo, la industria despachó un 12% más que en 2019.
Fuente: Vaca Muerta News